El contrato de kilometraje en leasing es una forma de contrato más segura para el cliente. Al especificar el kilometraje al principio del contrato y facturar al final del mismo en función de los kilómetros reales recorridos, el cliente se asegura un alto nivel de seguridad. Costes inesperados para el cliente protegido. Además, el contrato por kilómetros libera al cliente del riesgo del mercado de vehículos usados, ya que el kilometraje se fija de antemano. Así, con un contrato por kilómetros, el cliente conoce exactamente de antemano los costes en los que incurre por el arrendamiento de coches, lo que facilita enormemente la planificación y el control.
Definición del contrato kilométrico
Lo que puede aprender aquí
El contrato kilométrico es un tipo de leasing en el que el arrendatario se compromete a conducir un determinado número de kilómetros al año durante un plazo fijo. El arrendatario paga una cuota mensual en función del número de kilómetros recorridos. Al final del plazo, se le cobra un suplemento por cada kilómetro superado.
El procedimiento del contrato kilométrico
El proceso de un contrato de kilometraje en leasing es relativamente sencillo. En primer lugar, el cliente debe acordar con el arrendador un determinado número de kilómetros al año. Este número se incluye en el contrato. Si el cliente supera el número de kilómetros acordado, tiene que pagar una cuota adicional. Si el cliente no alcanza el número de kilómetros acordado, suele recibir un crédito por kilómetros reducidos. El contrato de kilometraje finaliza cuando se alcanza el plazo acordado.
Alternativas al contrato por kilómetro
Las alternativas al arrendamiento por kilómetros son Arrendamiento de valor residual, arrendamiento financiero y arrendamiento de servicio completodonde se puede ver el Coche mediante un modelo de suscripción puede reservar cómodamente.
Arrendamiento con valor residual
Una alternativa al alquiler por kilómetros es Arrendamiento con valor residual. Al final del plazo de arrendamiento, el arrendatario tiene la opción de vender el objeto a un Precio del valor residual acordado de antemano para hacerse cargo.
Aunque este precio de valor residual se fija al inicio del contrato de leasing, el arrendador puede ajustar posteriormente el precio de recompra. Si el valor real del coche al final del periodo de leasing difiere del valor residual calculado, el arrendatario asume la diferencia. Además, los proveedores de leasing se reservan el derecho de tener en cuenta la evolución del mercado de vehículos usados a la hora de recalcular el valor residual. Por ejemplo, cuando los coches diésel perdieron gran parte de su valor debido a las discusiones políticas, las personas con contratos de leasing de valor residual tuvieron que pagar de su bolsillo esta reducción del precio.
En resumen, el renting por valor residual suele ser más barato que el renting por kilómetros porque el arrendador asume un riesgo menor. La desventaja del leasing con valor residual, sin embargo, es que no puedes predecir exactamente cuánto tendrás que pagar al final del contrato. Esto se debe a que los costes dependen del futuro valor residual del coche, que no se puede predecir con exactitud.
Arrendamiento financiero
El leasing financiero es una compra a plazos del coche. Las cuotas del leasing se utilizan para pagar el precio de compra del coche. Sin embargo, el coche sigue siendo propiedad del arrendador hasta que se paga en su totalidad. Esto proporciona al arrendador una buena seguridad de realización y algunos concesionarios de automóviles han decidido utilizarlo. Los contratos de arrendamiento financiero también a pesar de Schufa negativo.
El arrendamiento financiero no incluye ningún componente de servicio adicional. Esto significa que sólo se alquila el vehículo en sí. El leasing financiero puede estructurarse como leasing de valor residual o leasing kilométrico.
Con el leasing financiero, puedes financiar el coche total o parcialmente a través del contrato de leasing. Si amortizas la totalidad del coche, ya es tuyo. Sin embargo, si sólo amortizas parcialmente el coche mediante el contrato de leasing, deberás pagar posteriormente el valor residual del coche. También puede devolver el coche sin coste alguno y arrendar uno nuevo.
Arrendamiento integral
Con el arrendamiento de servicio completo, el arrendatario puede elegir entre una gama de componentes de servicio como:
- Gestión de depósitos,
- Reparación y mantenimiento,
- Servicio de averías y vehículos de sustitución o
- Control del permiso de conducción
elegir. Puede combinar estos paquetes de servicios de forma modular. Cuantos más componentes de servicio añada, mayor será la cuota mensual de alquiler.
El leasing integral le ahorra el trabajo de mantenimiento y revisión del vehículo, ya que estos costes ya están integrados en la cuota mensual de leasing. Por lo tanto, el leasing integral le ofrece el mejor control de costes. Sin embargo, este servicio adicional también conlleva costes adicionales.
¿Cuándo conviene optar por un contrato de alquiler por kilómetros?
Un contrato de leasing por kilómetros puede ser una buena opción si necesitas un coche durante un determinado periodo de tiempo y puedes calcular bien el número de kilómetros anuales. Además, un contrato de leasing por kilómetros ofrece mayor seguridad que un contrato de leasing por valor residual, ya que el arrendador no puede repercutir una bajada del precio del coche al arrendatario. Quienes estén dispuestos a pagar una pequeña prima por esta seguridad deberían optar por el leasing kilométrico.
